Autismo VS Asperger

Buenas tardes, hoy contamos con una invitada especial:

Dª Rocío Rengifo Chincoa, psicóloga del Colegio de San Francisco de Paula, Sevilla, nos dará unas pinceladas sobre el tema tabú que existe entre los términos de Autismo y Asperger.

Rocío Rengifo, Psicóloga del Colegio.

• En breves palabras, ¿Podrías explicar algunas diferencias entre estos dos términos?

Por supuesto, el Autismo es el trastorno del espectro autista mientras el Asperger es un subtipo que se encuentra dentro de ese trastorno.

El Autismo puede ser leve, severo o de alto funcionamiento, según la capacidad del retraso (verbal/no verbal, psicomotricidad o inestabilidad social) estará en un grado u en otro.

La línea fina que diferencia el Autismo de Alto Funcionamiento (AAF) con el Asperger  es la deseabilidad social que tiene el Asperger, mientras esta cualidad desaparece en el Autista.

La psicomotricidad en el Asperger no es tan alterada. Los “estereotipias” en el Autismo son mucho más diversos que en el Asperger, al igual que las ecolalias y prosodias.

• ¿Tienen cura? ¿Cómo se trata?

Desafortunadamente no hay curas actualmente, al igual que tampoco sabemos sus causas.

Se sabe que la probabilidad de aparición es de 1 entre 68 personas y 1 entre 45 varones.

Existen terapias cognitivas-conductuales que le llevan a reforzar cognitivamente y a entrenar patrones de conductas, basadas en habilidades sociales.

• ¿Cómo se detectan?

Desde muy pequeño, con 6 meses de vida podemos apreciar si no se ríen, no miran a los ojos, no mantienen la mirada, etc.). A los tres años, en la escuela infantil, es donde se contempla el déficit de habilidades sociales y dificultades en el lenguaje, a raíz de ahí se diagnostica y se realiza un tratamiento personalizado.

• ¿Cómo actuar?

La actuación del entorno es muy importante (padres, madres, maestros, maestras, etc.), aceptando conjuntamente las necesidades del alumno/a, hijo/a.

Muchas gracias por su colaboración y por dedicar parte de su tiempo en esta entrevista.